En el mes de abril de 2019, en Paracas, localidad balnearia ubicada a orillas del Océano Pacífico, a 250 kilómetros al sur de Lima, Perú, General Motors Sudamérica Oeste realizó la introducción regional de la nueva Chevrolet Captiva, un vehículo que viene a reforzar la importante presencia de la marca en el competitivo segmento de los sport utility vehicles.

La presentación oficial para medios de comunicación de Colombia, Perú, Ecuador, Uruguay, Bolivia, y Chile, se realizó con la destacada presencia de las más altas autoridades de GM, entre ellos:  Carlos Zarlenga, presidente GM América del Sur; Ernesto Ortiz, presidente de GM Sudamérica Oeste (Bolivia, Chile, Colombia, Ecuador, Paraguay, Perú y Uruguay), y Luis Salem, director de Mercadeo de GM Sudamérica Oeste.

La primera generación de Chevrolet Captiva es de 2006 hasta 2018, de origen coreana, el SUV más vendido en la región con 65.000 unidades, con mayor fidelidad y 50% renovación de los clientes. Y ahora tenemos la flamante segunda generación, más familiar, moderna, eficiente y segura proveniente de China, con un cambio integral en diseño, tecnología y seguridad.

All New Captiva, llega en dos versiones, LT y Premier, y ha sido objeto de un importante rediseño general con respecto a la primera generación, ganando en equipamiento, seguridad, confort y diseño, tanto exterior como interior. Están equipadas con un motor 1.5 litros, turbo, DOHC, cuatro cilindros, 16 válvulas, que eroga una potencia de 147 HP y un torque de 230 Nm, y va acoplada a una caja de transmisión manual de seis velocidades, con aros de aluminio de 17” y 17” bitono, contando con tracción simple.

Exteriormente, los cambios se aprecian a simple vista, con un diseño más moderno y deportivo. Luce una apariencia adaptada a las nuevas tendencias de la marca lo cual se evidencia en los grupos ópticos delanteros. Estos están compuestos por unas delgadas franjas superiores que incorporan las luces DRL LED de circulación diurna, los faros de proyección halógenos en una posición intermedia y los neblineros en la parte inferior del vehículo y espejos exteriores con ajuste eléctrico. Chevrolet se arriesga por las líneas rectas que se aprecian desde una perspectiva lateral en elementos como la cintura del vehículo que le otorga un diseño familiar.